sábado, 17 de mayo de 2008

Linea 7

Los que viváis en mi ciudad y tengáis el placer de coger la linea 7, estaréis conmigo en decir que es de las lineas mas peculiares de todas, con sus desajustes horarios, con sus conductores "amables", con su gente habitual y con esa facilidad para ponerse a reventar a cualquier hora del día, bien, lo que os quiero contar no es eso, os quiero hablar de una historia de amor.

Os pongo en situación, iba ya montado en mi asiento de siempre, cuando nos acercamos a una parada, ahí se podía ver de todo, desde la típica abuela con su carrito, pequeños macarras de barrio, hasta gente de cualquier nacionalidad, pues entre todos ellos me llamo poderosamente la atención una pareja que parecían muy enamorados, ahí agarrados de la mano, abrazándose y dándose besitos.Pues nada mas lejos de la realidad, empieza a subir la gente al bus y les llega su turno, primero pasa el chico, paga el billete de los dos y luego pasa la chica, empiezan a caminar por el bus y ella decide sentarse en un sitio con otro libre al lado, pensando que su pareja se sentaría con el, pues nada, el chico sigue hacia adelante y se sienta 4 asientos mas atrás y mirando en la dirección opuesta.La chica le hace un gesto y le grita que se siente con el, a lo que su novio le responde de la misma manera, a mi ya la situación me estaba pareciendo mas que graciosa...
Pues nada continua el viaje y ahí seguían cada uno en su sitio empecinados en que su sitio era el idóneo para el trayecto, el chico hace varios amagos de levantarse, la chica ni se inmuta...
El viaje continua y ya falta poco para que se llene el bus, pasadas 5 paradas o 6, el chico no aguanta mas y pensando que alguien se puede sentar con su mujercita, se levanta, se va para ella y le dice con golpecito en el brazo: !ves, ya lo has conseguido¡ ¿Contenta?
Ella, lo mira y sonríe...Las mujeres son las dominantes ¡siempre!

De esta situación yo saco algunas conclusiones: ¿realmente estaban enamorados? ¿Saben lo que se perderán, cuando no estén juntos? Deberían de valorar las pequeñas cosas un poquito mas, realmente el amor esta echo de pequeñas cosas, no de momentazos increíbles o de fantásticos aniversarios, es muy fácil portarse bien o ser detallista un día o dos, pero ser atento y cuidar de la persona que quieres todos los días es lo delicado...

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo pienso que sí que pueden estar enamorados pero no saben lo que se pierden. Es precisamente esa ignorancia la que hace que en vez de estar todo el trayecto del bus juntos, al final nada más que estén las ultimas paradas antes de llegar a su destino.

Próximo destino: Línea7

Anónimo dijo...

a) el tio es un calzonazos
b) los dos son unos masillas por ir en bus
c) y tu eres un vouyeur de tres al cuarto!!

Anónimo dijo...

d) al menos vas en la linea 7, no en la 5, q pasa cada media hora (con suerte) y da un rodeo de la ostia...
XD

LoOla dijo...

Hasta que alguno de los dos no pierda al otro no se darán cuenta de lo que se han querido...

Es preferible viajar en escoba, te lo recomienda una bruja :D

Besos brujetes!

Anica dijo...

Compi, sabes que es lo que yo creo? que es uno de los primeros pasos del amor tontuno, la picardia, el rifi-rafe, el tira y el afloja, la provocación, el pique, el juego, el tonteo en si. No creo que se esten perdiendo nada, forma parte del juego. De todos modos me aprecio curiosa la entrada.Un saludo pajaro

Anónimo dijo...

Q razón tienes...

.elena ortiz dijo...

es tan difícil enamorarse. la gente realmente cree que lo está, pero no, sólo unos pocos son los afortunados. yo la verdad es que nunca lo he estado. tampoco recuerdo besos manchados de pasta de dientes porque nunca nadie me los dió. viajo sóla sin nadie que me haga cosquillas en el brazo a mi lado. tampoco tengo fantásticos aniversarios en los que me regalan un beso. la gente no valora lo que tiene. te lo digo yo, que lo valoro sin tenerlo.

me encanta tu blog, me pasaré por aquí :)

un beso,
elena.

.elena ortiz dijo...

p.d: odio comer sola.

Raúl dijo...

El amor es algo que casi estoy olvidando... es un estado mental en el cual los dos están atontados y se evaden de una realidad y crean su propio mundo de fantasías en donde todo es genial.
Ese juego del autobús no es más que eso, un "juego" donde demuestra quién puede aguantar más sin el otro, y queda comprobado que el chico (como de costumbre) aguanta poco.

illeR dijo...

Jajaja, esa escena podia haberla protagonizado yo, me ha hecho gracia, me he sentido identificada, soy igual de cabezota...